domingo, 10 de mayo de 2020

RELACIÓN UNIVERSIDAD – SOCIEDAD POR MEDIO DE LA EXTENSIÓN


RELACIÓN UNIVERSIDAD – SOCIEDAD POR MEDIO DE LA EXTENSIÓN 


UNIVERSITY-SOCIETY RELATIONSHIP THROUGH EXTENSION

-          Mag. Christian David Godoy Silveira1

-          Mag. Aura Rebeca Fernández Lopez²

-          Mag. Diego Sotomayor³

-          Mag. Viviana Riveros4


RESUMEN

 

            Las instituciones de Educación Superior siempre han tenido dificultades para relacionarse con las sociedades en las cuales estaban insertas, la extensión se constituye en ese sentido en el nexo que permite la interacción enriquecedora, sin embargo, la misma es en muchos casos confundida con el asistencialismo o realizada desde un nivel de superioridad intelectual por parte de la academia. En el presente artículo analizaremos las diferentes teorías existentes con respecto a la relación de la universidad con la sociedad por medio de la extensión y como esto contribuye al fortalecimiento de ambas instancias.

Palabras clave: Extensión Universitaria, Responsabilidad social universitaria, relación horizontal en la extensión.


 

ABSTRACT

 

               Higher education institutions have always found it difficult to relate
 to the societies in which they were inserted, extension being constituted 
in this sense in the link that allows enriching interaction, 
However, it is in many cases confused with assistance or carried out from 
a level of intellectual superiority on the part of the academic. In this article
 we will analyze the different existing theories regarding the relationship 
of the university with society through extension and how this contributes
 to the strengthening of both instances. 
Keywords: University Extension, University social responsibility, 
horizontal relationship in extension

ANTECEDENTES

Los primeros signos de extensión universitaria se dan en Inglaterra y se extienden a otros países europeos y de América del Norte ante el crecimiento industrial. La universidad responde a esa transformación socio económica, interrelacionándose de diversas formas de sociedad.

 

En América latina, recién en 1918 con la reforma que brota incontenible en la Universidad Nacional de Córdoba, se rompe con el enclaustramiento que desde la época de la colonia mantenía a la universidad dentro de sus paredes académicas y se piensa en su función social. (Daniel Cohen, 2016, pág. 14)

 

Acercándonos un poco más a la historia, el alcance así como el sentido de la extensión, en tanto función de la universidad, no tuvo un único acuerdo entre estudiantes del Movimiento Reformista de 1918sino muchos desacuerdos. Según Pablo Buchbinder, se distinguieron principalmente dos posiciones e interpretaciones de extensión en la demanda estudiantil del Movimiento de 1918.

 

Un grupo minoritario proponía abarcar proyectos de cambio social y político. Dicho grupo se manifestaba por una universidad popular a la que pudieran acceder todos los sectores sociales. Mientras que el sector más numeroso se inclinaba en la defensa de los aspectos puramente universitarios. (Buchbinder, 2008, pág. 16)

 

Desde ese entonces, el extensionismo latinoamericano ha sufrido altibajos de las fluctuaciones políticas de países que se han debatido entre regímenes dictatoriales, democráticos y neoliberales.

 

Se ha retraído muchas veces para aparecer en estos últimos años bajo distintas concepciones, con distintos grados y modos en su noción de participación. Pero pareciera que la concepción que prima y que distingue a la universidad latinoamericana es el énfasis en intentar poner su saber al servicio de la sociedad. Eso la diferencia de otras universidades del mundo.

 

Por ello no podemos desentendernos de las múltiples controversias de las que el término extensión ha sido y sigue siendo objeto en Latinoamérica. Al tratarse de una noción histórica y práctica, es decir, practicada y conceptualizada de diferentes modos en diferentes momentos históricos desde su concepción en la Reforma Universitaria han sido cuestionadas.

 

Paulo Freire, continuando con su idea de educar para la liberación, la contrapone al concepto de comunicación en beneficio de esta última.

 

El educador brasilero analiza el término como la transmisión de un contenido por un sujeto activo (el que extiende), el cual se encuentra más allá o fuera del muro (de ahí que se hable de actividad extra muros), que entrega ese contenido ubicado en una posición de superioridad a los sujetos que se encuentran en condición de inferioridad. Freire llama a esta relación “mesianismo” prefiriendo llamar “comunicación” a la relación horizontal que se establece entre sujetos de la educación, dos o más hombres, cada uno poseedor de distintos saberes, conscientes de que a través de esa relación podrá hacer suyo un nuevo saber. (Freire, 1973)

 

La educación es comunicación, es dialogo en la medida en que no es la transferencia del saber sino un encuentro de sujetos interlocutores que buscan la significación de los significados. (Freire, 1973, pág. 20)

 

El concepto redefinido y acordado en la Segunda Conferencia Latinoamericana de Extensión Universitaria y Difusión Cultural introduce la idea de interacción, es decir, la ida y vuelta permanente de la Universidad al resto de los cuerpos sociales y de los cuerpos sociales a la universidad. En este dialogo permanente surgen nuevos significados, nuevas interpretaciones que se inscriben en la cultura y a su vez se modifican.

 

Extensión universitaria es la interacción entre la Universidad y los demás componentes del cuerpo social, a través de la cual ésta asume y cumple su compromiso de participación en el proceso social de creación de cultura y de liberación y transformación radical de la comunidad nacional. (Túnnermann, 2003)

 

            Hacer extensión es difícil, roba el tiempo no del aula sino del docente y del alumno que, fuera de las horas de la curricula, se embarcan en la tarea extensiva; requiere también un trabajo intenso de preparación del extensionista dentro del aula. Esa preparación no significa solamente transmitirle los conocimientos de la materia que se dicta, brindarles las técnicas para el trabajo de campo, sino educarlos para enfrentar la realidad que van a encontrar fuera del claustro, atenuarle los miedos y la soberbia, explicarles la importancia del otro en el proceso de interacción.(Daniel Cohen, 2016)


La extensión Universitaria una relación Horizontal

 

            En los últimos años ha crecido exponencialmente el trabajo de extensión en las distintas cátedras, en las diferentes facultades y universidades.

 

            En su definición de porqué la Universidad hace extensión está el concepto de servicio directo a la comunidad y justifica su existencia en cuanto realiza una acción continua de carácter social, educativa y cultural, acercándose a todas las fuerzas vivas de la nación para estudiar sus problemas, ayudar a resolverlos y orientar adecuadamente a las fuerzas colectivas. (Rodriguez, 2016)

 

            En algunos trabajos extensionistas, desde el principio, el objeto y los actores (es decir, la comunidad o instituciones) son concebidos desde una relación desigual con respecto al equipo extensionista. Por un lado, los proyectos fueron decididos sin alguna forma de dialogo con la comunidad, tantas veces llamados “beneficiarios” y llegan a fallar ya que no fueron sensibles hacia los aspectos sociales y culturales dela realidad de esa comunidad. La misma termina teniendo un rol pasivo frente al proyecto de desarrollo, no participa en él, es decir, no hay un sentido de propiedad sobre los proyectos que han sido decididos en implementarlos en un esquema de arriba hacia abajo.

 

            Por otro lado, aunque puede ser complementario, en muchos casos los grupos extensionistas se colocan en un rol diferenciado con respecto a la comunidad a partir del saber con el que cuentan, menospreciando el propio saber que tiene cada uno delos actores que componen una comunidad. Se evalúa que el conocimiento de la vida cotidiana, es limitado y erróneo, carente de la más mínima capacidad de orientación en la situación social en la que se transita. Sin embargo, todo ser humano tiene conocimientos válidos para enfrentar la situación que le toca vivir.

 

            “Nadie es totalmente ignorante, hay una sabiduría de la vida cotidiana, producto de la acumulación de experiencias, de la confrontación con las condiciones de existencia, sabiduría a menudo más valida que las propuestas teóricas. Pero ella no es suficiente para enfrentar todo. En este sentido, la gente sabe y no está preparada para algunas situaciones, carece de la información y de las experiencias necesarias para enfrentar otras” (Castillo, 2004)

 

            El rol de extensionista, es decir, del comunicador social, es el de un facilitador del proceso, pero no ya como el que enseña y dirige, sino para acompañar al otro, para estimular ese proceso de análisis y reflexión y para facilitárselo. Para aprender junto a él y de él para construir juntos.

 

            Lo que importa, más que enseñar cosas y transmitir contenidos, es que el sujeto aprenda a aprender; que se haga capaz de razonar por sí mismo, de superar las constataciones meramente empíricas e inmediatas de los hechos que lo rodean (conciencia ingenua) y desarrollar su propia capacidad de deducir, de relacionar, de elaborar síntesis (conciencia crítica). (Kaplun, 1985)

 

Responsabilidad social universitaria

 

“La responsabilidad social universitaria es una instancia que pretende solidificar las bases solidarias individuales y que intenta responder críticamente a la ambivalencia de valores y prioridades en los distintos estratos sociales por medio de una educación enfocada en el individuo y sus necesidades humanas”(RED BID, 2004)

 

            Resulta cada vez más aceptado en el mundo académico que la responsabilidad social de la Universidad es algo que pertenece a su naturaleza.

 

            La “Declaración Mundial sobre la educación Superior en el Siglo XXI: Visión y Acción”, hecha por la conferencia Mundial, promovida por la Unesco y realizada en Paris del 5 al 9 de octubre de 1998, ha requerido subrayar y reforzar este hecho.

 

            La misma según Daniel Cohen consiste en:

 

-          Función institucional: Cumplir con todos los deberes éticos, jurídicos y legales adquiridos con relación a sus miembros.

 

-          Función política: construir una comunidad bien ordenada, acorde con los principios y valores éticos que profesa, el primero de los cuales ha de ser el bien común.

 

-          Función cultural: procurar el cultivo y desarrollo de las capacidades y habilidades propias de los individuos tanto en el campo intelectual como estético y físico.

 

-          Función proyectiva deservicio: Interrelacionar a la comunidad interna con el medio exterior y sus necesidades.(Daniel Cohen, 2016, pág. 38)

 

La universidad propiciadora de espacios de interacción, adecuadamente orientados, genera espacios para el aprendizaje y fomenta redes que ayudan al desarrollo sostenible de una comunidad. De esta manera, las relaciones organización/comunidad y estudiante/universidad se benefician de la interacción: el estudiante al aproximarse a la realidad de una organización social aplica los conocimientos y habilidades adquiridos, y posee la oportunidad de utilizar su creatividad y recursos intelectuales en la solución de problemas. La organización/comunidad tiene acceso no oneroso al capital intelectual que posee el estudiante, el cual es apoyado por la universidad, en la forma de tutores.

 

      Estas experiencias son las que llevan a la formación de profesionales, que empiezan a experimentar, desde su etapa de formación académica, los problemas reales de su entorno y consiguientemente, comienzan a valorar y a participar en la problemática social de su comunidad, bajo un concepto que hace a la responsabilidad social universitaria.

     

      La calidad de la educación superior como calidad de actuación ante la sociedad. Ello se entiende como mejoramiento permanente del flujo social de la universidad o institución de educación superior en el territorio. El flujo social de las instituciones de educación superior no es desde la institución hacia la sociedad, pues la institución educativa es, desde el comienzo, parte y también resultado de la sociedad. Dicha relación, para las instituciones de educación superior, es fluir en interacción con la sociedad, involucramiento mutuamente transformador y potenciador del mejoramiento continuo. (Forino, 2018)

 

El Triángulo dinámico de la formación universitaria

 

            Mediante la publicación Serie Análisis Coyuntural 1 – La Reforma de la Educción Superior de 2010, Juan Díaz Bordenave explica cómo entiende se debe trabajar la extensión, en lo que denominó “El Triángulo dinámico de la formación universitaria”.

 

            No importa los fines que prevalecen en las diversas instituciones de educación superior, existe sin embargo un cierto consenso de que, para alcanzarlos, la universidad tiene que utilizar tres procesos o funciones:

-          La enseñanza – aprendizaje

-          La investigación

-          La extensión

 

A la interrelación orgánica de estos tres elementos al momento de formación del futuro profesional llama “El Triánguloenseñanza-investigación-extensión”. Sin embargo, no es nuestra realidad dado que las mismas se constituyen en actividades paralelas, poco comunicadas entre sí. Este paralelismo y desequilibrio, predominante en la mayoría de las universidades iberoamericanas, se manifiesta en una distribución de recursos semejantes al que sigue: Enseñanza: 80% - Investigación: 15% - Extensión 4%. (Bordenave, 2010)

 

            Guilherme Ary Plonsky, de la Coordinación Ejecutiva de la Cooperación Universitaria y de Actividades Especiales (CECAE), de la Universidad de San Paulo comenta: “El proyecto Becas de Extensión refleja la importancia de la inversión en el trípode enseñanza-investigación-extensión en la universidad moderna. En este contexto, dos contrataciones emergen: la democratización del saber académico contribuye a la presencia relevante de la comunidad en la vida universitaria; y la prestación de servicios, sirviendo de base a la investigación, es capaz de contribuir a la transformación de nuestros estudiantes y también de la sociedad”. (Plonsky, 2008) citado por (Bordenave, 2010)

 

La mediación de las tecnologías de la información y la comunicación en las prácticas de extensión

 

             La inclusión de las TIC en distintas situaciones educativas ha generado posiciones de distinto tipo que van desde quienes las consideran herramientas que pueden mejorar las prácticas de enseñanza hasta quienes consideran que multiplican las formas de aprender.

 

            Si bien el aprendizaje se puede dar en cualquier lugar y momento y las TIC han potenciado esta posibilidad, también han modificado las formas de aprendizaje. Esto quiere decir que las interfaces digitales en las cuales interactuamos para construir un saber nuevo, no son inocentes. Por el contrario, los dispositivos que organizan un contenido son entornos significativos que condicionan la interpretación de aquellos que conocemos a través de su mediación, al proponer determinados órdenes de lectura y suponer determinadas competencias para la interacción. (Ceranto, 2016)

 

            En pocas palabras, hacer extensión es conectar el conocimiento con la vida, para escribir un relato nuevo, a partir de gramáticas propias y ajenas. En las experiencias de esta escritura, las tecnologías de la información y la comunicación nos colocan ante la posibilidad de una nueva técnica para narrar: el hipertexto, que según Jesús Martin Barbero, nos presenta otra textualidad en la que emerge una nueva experiencia de interpretación, distinta a la que conocieron generaciones anteriores, que seguía la secuencia lineal de la palabra impresa. Esta nueva experiencia requiere del mismo movimiento de intertextualidad del palimpsesto, que es ese texto que se deja borrar pero no del todo, posibilitando que el pasado emerja, aunque borroso, en las entrelineas que escriben el comprimido y nervioso presente.  (Margaret Mead citado en (Barbero, 2002)

 

CONCLUSIÓN

            La relación de la Educación Superior en general y en particular de las Universidades con las sociedades en las cuales se encuentran insertas se da o se debería dar a través de la Extensión Universitaria; mediante la misma la responsabilidad social universitaria se interpreta, no de manera unilateral, en donde la casa de estudios es la que analiza, planifica y ejecuta, y, la sociedad asume el rol pasivo de beneficiario, ni siquiera es unidireccional en cuanto a los beneficios o aprendizajes, sino como un espacio generado para el aprendizaje y fomento redes que ayudan al desarrollo sostenible de una comunidad.

 

            Mediante la correcta interacción de todos los componentes misionales de la Universidad se da el triángulo dinámico de la formación universitaria en donde el beneficio a más de ser equitativo entre los entes participantes (Universidad- sociedad) genera para la primera una cascada de beneficios académicos que permiten el óptimo aprovechamiento de la misma. No obstante, para la integración y el equilibrio del triángulo, la extensión debe formar parte del currículo en el mismo nivel de importancia, tiempo y recursos destinados a la investigación y a la enseñanza. Todo estudiante debería participar de actividades de extensión en su programa.

 

            La extensión debe complementar la investigación y la enseñanza en cada materia y curso. Debiendo estar de esta manera configurado el criterio de selección de proyectos de extensión.

 

            Todas la Universidades deberían poseer una instancia especifica que organice, planifique y promuévala Extensión Universitaria y en especial la interacción orgánica con la investigación y la enseñanza, teniendo presente la común tendencia de desarrollarse cada una de manera independiente a la otra.

         

BIBLIOGRFIA, REFERENCIAS Y FUENTES CONSULTADAS:

 

Barbero, J. M. (2002). La educacióndesde la comunicación. Buenos Aires: Norma.
Bordenave, J. D. (2010). El triangulo dinamico de las formación universitaria. En C. N. CONEC, Serie Análisis Coyuntural 1 - La Reforma de la Educación Superior. Asunción: Consejo Nacional de Educación y Cultura CONEC.
Buchbinder, P. (2008). ¿Revolución delos claustros? La Reforma Universitaria de 1918. Buenos Aires: Sudamericana.
Castillo, D. (2004). Diagnostico de comunicación. Quito: Ciespal.
Ceranto, V. (2016). Hacia una revalorización delconceptode extensión universitaria. En Extensión Universitaria (pág. 27). Cordoba: Editorial Brujas.
Daniel Cohen. (2016). Extension Universitaria - Posicion ideologicay decision politica, al servicio dela comunidad. Cordoba: Cordoba Brujas.
Forino, V. M. (2018). Callidad y responsabilidad social en la educciónsuperior. En U. ISEALC, El rolde la educación superior de cara a los desafios socialesde América Latina y elCaribe. Cordoba: Universidad Nacional de Cordoba.
Freire, P. (1973). Extension o comunicacion? Mexico: SigloVeintiuno Editores.
Kaplun, M. (1985). El comunicador polular. Quito: Ciespal.
Plonsky, G. A. (2008). A USP Mais Perto de VOCE. Folheto produzido pela Coordenadoria Executiva de Cooperacao Universitaria e de Actividades Especificas CECAD. San Paulo: CECAD.
RED BID, R. U. (2004). Como promover laresponsabilidad social universitaria.
Rodriguez, A. S. (2016). La extensión Universitaria una relación horizontal. En D. Cohen, Extensión Universitaria (pág. 31). Cordoba: Brujas.
Túnnermann, C. (2003). La Universidad ante los retos delsiglo XXI. Mexico: Ediciones de la Universidad Autonoma.

 


1Magister en Asuntos Públicos y Gobernabilidad por la Universidad Columbia del Paraguay

cg.peco@gmail.com

²Magiter en Asuntos públicos y Gobernabilidad por la Universidad Columbia del Paraguay
abgaurafernandez@gmail.com

³Magiter en Asuntos públicos y Gobernabilidad por la Universidad Columbia del Paraguay
sotomayordiego33@gmail.com

4Magiter en Asuntos públicos y Gobernabilidad por la Universidad Columbia del Paraguay
viviana.riveros.py@gmail.com