ÁMBITO UNIVERSITARIO
La educación universitaria
El otro día leía en el diario acerca de un posgrado virtual que implementará una universidad de nuestro medio que me interesó muchísimo. Aunque los costos estaban elevados para mi poder adquisitivo, el curso lo justificaba sobradamente.
Esta es una cuestión muy debatida en el entorno familiar a la hora de hablar sobre la posibilidad de seguir una carrera universitaria. Como están las cosas hoy en día los padres piensan dos veces antes de comprometerse a costear la carrera universitaria de sus hijos.
Inversión
Es muy importante por más que hoy en día sea muy difícil, ver desde este punto de vista las cosas. Hay que tener presente que la universidad es una inversión y no un gasto, y que esta inversión rinde sus frutos a un largo plazo.
Los costos del estudio universitario, sin lugar a dudas, son elevados y exigen ciertos esfuerzos y privaciones de aquellas personas comprometidas a fin de poder cumplir con ellos.
La coherencia con los gastos
El estudiante universitario debe ser consciente del gasto que sus estudios traen a la familia y por ello debe ser prudente y coherente en sus demás gastos.
Si bien siempre existe la posibilidad de que el estudiante universitario trabaje, y con ello colabore con los gastos que conllevan sus estudios, los gastos familiares de la casa siempre estarán ahí.
No es solo dinero
Y este es un punto que es muy importante: la familia no solo invierte dinero en el estudiante universitario, sacrifica proyectos propios, invierte tiempo, paciencia, y sobre todo mucha esperanza.
Es necesario que estas situaciones sean tenidas en cuenta por el estudiante a la hora de valorar los logros de un buen rendimiento académico.
La retribución
Este es un pilar muy importante para el buen relacionamiento familiar durante el periodo universitario. Todos aquellos sacrificios que realiza la familia para poder tener a uno o varios hijos estudiando carreras universitarias proporcionalmente se agrandan o achican con el esfuerzo, dedicación y logros académicos que va teniendo el estudiante. Así tenemos que a menos dedicación y esfuerzo, por supuesto vendrán las consecuentes notas mediocres o peor aún los aplazos y esto traerá decepción y dudas sobre la inversión realizada y en sentido contrario a más esfuerzo, dedicación sobrevienen los logros académicos y con ello el apoyo y soporte familiar crece con el orgullo y la ilusión de tener un profesional en la casa.
Por último, quisiera expresar que siempre vale la pena invertir en la capacitación personal, y, en el ámbito del saber el aprendizaje y la actualización son constantes, por los tanto los padres anímense a invertir en la capacitación de sus hijos y estos a la vez no los decepcionen con notas y promedios mediocres.
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