viernes, 3 de septiembre de 2010

Autonomía universitaria: ¿carta blanca a las universidades? - Publicado en ABC Color - 04/08/2009

ÁMBITO UNIVERSITARIO

Autonomía universitaria: ¿carta blanca a las universidades?

por
Abg. Christian Godoy
 
La autonomía universitaria es una discusión que no ha empezado en nuestro país y que merece ser tomada con la seriedad que corresponde en virtud de hechos que acontecen en la actualidad, que amenazan con dejar secuelas graves en el ámbito de la educación superior de nuestro país.

Autonomía total

Con la modificación de la Ley 136 “De Universidades”  cercenando la capacidad de control que tenia el Consejo de Universidades se ha otorgado a las universidades la autonomía total para crear carreras y establecer sus planes y programas de estudio.
La autonomía no debería ser ningún inconveniente de por sí, pero las aberraciones que se están cometiendo en nombre de ella, sin lugar a dudas, traerán problemas y secuelas a nuestra sociedad.

Todo vale

Convalidar materias de tecnicaturas para carreras de grado, validar materias cursadas en el extranjero, crear nuevas carreras, todo ello sin tomar las medidas para asegurar la calidad de la enseñanza. No someterse a los controles de calidad establecidos por las instancias correspondientes para tecnicaturas. Inclusive, en áreas tan sensibles como la salud, una universidad privada está implementando carrera de anestesiología para bachilleres, siendo ésta en el mundo entero una carrera habilitada para posgrado.

Juez y parte de un negocio muy rentable

El problema se torna más serio aún cuando se quiere reclamar y se descubre que las personas encargadas de recibir el reclamo e iniciar el proceso de cambio son aquellas personas que en primer lugar instauraron este caos pedagógico con el objetivo de sacar el mejor provecho personal y monetario de ello. Es un sinsentido ir a reclamar al Parlamento, en donde nuestros legisladores son juez y parte de este negocio tan rentable.
Desde este punto de vista, hasta parece comprensible que no se promulgue nunca la ley de la educación superior, pues esta terminaría con muchos de estos problemas y, consecuentemente, afectaría los intereses de muchos legisladores.

Medidas de presión

Es necesario que la sociedad civil se despierte y exija al Gobierno que se ponga firme e inicie el proceso de cambio pedagógico-administrativo en el nivel terciario de nuestro país, pues, de seguir así, en un tiempo breve se empezaran a ver las consecuencias del descontrol existente en la actualidad.
La autonomía no debe significar una carta blanca para nadie, recordemos que los profesionales que egresan de todas las universidades deben estar capacitados para ejercer su profesión, pues de no estarlo, causarían un perjuicio a la sociedad. Y esto es un lujo que no podemos permitir sobre todo en áreas más sensibles como salud, educación, etc.

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